Pontevedra, 30 de enero de 2018.- La Rede Galega Pola Igualdade (REGAI) ha presentado ante el Consejo General del Poder Judicial una queja formal tras el nombramiento de María Elósegui como nueva jueza del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.
“La trayectoria de esta magistrada es totalmente contradictoria a los principios de derechos humanos que deberían regir los trabajos del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y sin duda pone en cuestión su credibilidad”, esgrime el colectivo feminista gallego presidido por Carmen Cajide Hervés. La REGAI apunta múltiples razones para oponerse a este nombramiento y recuerda que existe numerosa documentación que atesora el rechazo de Elósegui a la homosexualidad, transexualidad y al derecho a decidir de las mujeres.
La homosexualidad conlleva “mayores riesgos de contraer enfermedades de transmisión sexual” y “es una conducta mucho más compulsiva y lleva, a pesar de la gran necesidad afectiva de estas personas, a tener un elevado número de parejas” son sólo dos afirmaciones que dejan absolutamente claros los prejuicios de Elósegui hacia parte de la población. En la misma línea, la REGAI recuerda que dicha persona se refirió a la transexualidad como una “enfermedad o patología, una tragedia” que “puede llegar a requerir intervenciones psíquicas”. Se trata de un desprecio absoluto hacia los derechos de las personas que hacen incompatible la presencia de María Elósegui en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
También ha opinado sobre el derecho de las mujeres a decidir: “No es cierto que el hecho de que el aborto sea ilegal implique más muertes de mujeres por abortos clandestinos” y la fidelidad “es un valor importante para el hombre pero todavía más para la mujer” son frases que la REGAI suma a la colección de afirmaciones vertidas por quien va a formar parte del TEDH.
Mentiras en su currículum vítae
A mayores, la REGAI recuerda que María Elósegui falseó su currículum vítae, con la inclusión de acciones no sólo no confirmadas, sino desmentidas, que la presentan como abanderada de una idea de igualdad que ni cree ni respeta. Prueba de ello es que se nombró a sí misma coautora del anteproyecto de la Ley para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, hecho negado por las personas impulsoras del documento legislativo.
Por supuesto, resulta increíble que alguien que protagoniza afirmaciones tan ofensivas e irrespetuosas haya formado parte de un equipo profesional designado para redactar un texto encaminado a la promoción de la igualdad que tiene rango de Ley. Por el mismo motivo, es incomprensible que quien abandera la homofobia sea la persona elegida para formar parte del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.
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